Brave instala una VPN de pago sin el consentimiento de sus usuarios

Brave, el navegador que promete proteger nuestra privacidad tiene una función oculta que puede molestar a algunos usuarios: instala su propia VPN en Windows sin pedirnos permiso. La VPN de Brave es un servicio de pago que nos permite navegar de forma anónima y segura por Internet, pero que no todos los usuarios quieren o necesitan. Sin embargo, al instalar el navegador, también se instalan los servicios de VPN en nuestro equipo, aunque no los activemos ni los contratemos.

Esto puede suponer un problema por varias razones. Primero, porque se trata de una falta de transparencia por parte de Brave, que no nos informa de que está instalando estos servicios en nuestro equipo. Segundo, porque estos servicios pueden ocupar espacio y recursos en nuestro sistema, aunque estén desactivados. Tercero, porque pueden generar conflictos con otras VPN que tengamos instaladas o que queramos usar. Y cuarto, porque pueden suponer un riesgo para nuestra seguridad si alguien accede a ellos sin nuestro conocimiento.

Para comprobar si tenemos los servicios de VPN de Brave instalados, podemos abrir la aplicación «services.msc» sin las comillas desde la función Ejecutar (Win + R). Los servicios se llaman: Brave Vpn Service y Brave Vpn Wireguard Services (imagen arriba). Si queremos eliminarlos, la única opción es desinstalar el navegador por completo.

Brave debería ser más claro con sus usuarios y ofrecerles la opción de elegir si quieren o no instalar su VPN en Windows. No tiene sentido que se instale por defecto una función que es opcional y que muchos usuarios no usarán, pues hay otras alternativas más económicas y compatibles con más dispositivos que este navegador web.

Más información: github

Gracias Manfred Aguilar Perez por el aviso