Algunos usuarios reportaron problemas de rendimiento con ciertos SSD NVMe en Windows 11. El rendimiento se redujo hasta un 45% en comparación con Windows 10. Parecer ser que Microsoft solucionó este problema con una de las últimas actualizaciones para el sistema operativo.
Según este artículo en el blog de Windows Latest, el parche con la actualización KB5007262 debe solucionar el problema:
En un documento de soporte publicado el 22 de noviembre, Microsoft también reconoció el problema, identificado por primera vez en agosto, y comenzó a probar una solución como parte de la actualización opcional (KB5007262) para el sistema operativo.
Si eres usuario de Windows 11 y presentas problemas de con tu unidad SSD NVMe, dando como resultado un sistema lento, puedes descargar el parche KB5007262 como actualización opcional, y comprobar nuevamente el rendimiento. Esta actualización es segura, ya que la compañía las aprueba.
Vaya a Configuración> Actualización y seguridad> Actualización de Windows. En el área de actualizaciones opcionales disponibles, encontrará el enlace para descargar e instalar la actualización.
Esta actualización no solo soluciona muchos errores, sino que también viene con mejoras y nuevas funciones.
